Café de filtro
Quizás la forma más fácil de preparar varias tazas de café en poco tiempo: el café de filtro rechaza la gran presión del mundo del espresso por un método más pausado y delicado. El resultado es una bebida más ligera, menos concentrada y a menudo, más compleja.
Consejo - La forma del filtro influye en el sabor del café, por lo que con los mismos granos podrás saborear distintos matices. Prueba ambos filtros y encuentra tu favorito.
Reúne los elementos
Vaso o taza grandes
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1. Preparación del filtro
Antes de empezar, nos gustaría recordar que la dosis depende de dos factores: el número de tazas que vayas a preparar y cómo te gusta el café. La SCA recomienda una proporción de 1:18, es decir, unos 55 g de café por litro de agua.
Primero, coloca el filtro de papel en el filtro semicónico. Este tipo de filtro ayuda a potenciar el sabor. Humedece ligeramente el papel.
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2. Molido
Muele 23 g de granos de café hasta que obtengas una textura parecida a la sal gruesa. Agrega el café molido al filtro y golpéalo suavemente para distribuirlo.
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3. Agua
Llena el depósito de agua con 500 ml. Elige la opción para el estándar Gold Cup de la SCA de la cafetera Precision Brewer y deja que la máquina haga lo que mejor sabe hacer.
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4. Vertido
Vierte el riquísimo café de filtro directamente de la jarra.